Los sistemas on grid o conectados a red permiten generar parte de la energía eléctrica que consume la vivienda o industria y obtener el resto de la energía de la red eléctrica.
Una de las particularidades más interesantes es que permite inyectar, y vender, el excedente de la energía eléctrica generada a la distribuidora eléctrica del lugar, generando un beneficio económico.
Estos equipos no cuentan con baterías, en los momentos en donde los paneles fotovoltaicos no estén generando, la energía demandada por el usuario es tomada automáticamente de la red.

Los sistemas off grid son aquellos que se encuentran aislados de la red eléctrica, en general, por estar fuera del alcance del tendido eléctrico, como campos y chacras. Compuestos por un banco de baterías donde se almacena la energía para ser utilizada en horas de la noche.
Estos sistemas tienen gran cantidad de aplicaciones, desde el abastecimiento de una luz en particular hasta la totalidad de la vivienda, energizando heladeras, luces, televisores, computadores y demás artefactos domésticos.

Los sistemas híbridos se caracterizan por ser una combinación de los sistemas nombrados anteriormente. Son equipos conectados a la red con almacenamiento de energía.
Son útiles en zonas con suministro eléctrico deficientes donde los cortes de luz son frecuentes. La energía se acumula en baterías para ser utilizada durante una interrupción del servicio eléctrico.